licencia Creative Commons

miércoles, 15 de abril de 2015

LES PRESENTO A NUESTRA FAMILIA CHINA




Una de las cosas más duras de toda esta aventura es la falta de tu círculo familiar.... Yo el círculo más cercano lo tengo cubierto porque mamá y papá siempre están cerquita... Cuando me acuesto y cuando me levanto ahí están los dos, así que ese vacío del que habla la gente yo no lo tengo. Llegué aquí con 6 meses así que esta es mi casa y la gente que me rodea es mi familia. Supongo que por eso mi mamá dijo que o nos veníamos antes de que yo cumpliera los 3 años o no nos veníamos (ella sabe de lo que habla...es experta en esto de cambiarse de país!!)

Y aunque ninguno lo dice abiertamente yo sé que les cuesta estar aquí solos, sin sus papás y sus mamás...yo no me puedo imaginar mi vida sin ellos, la verdad.... Debe de ser muy duro. Y si a eso le sumamos el hecho de que no hablan el idioma (mira que ellos lo intentan eh, pero...) pues la ausencia se hace todavía más grande. Así que su valentía es ENORME!!!

Pero somos personas y necesitamos tener cerca gente que nos quiera y nos ayude y aunque los abus y el tío y la yaya siempre están presentes por Skype o por videos, el día a día se hace aquí y una familia tendría que ser más que una mamá, un papá y un bebé.... por eso supongo que el destino nos puso cerca a la familia Ao, para hacer que no nos sintiéramos tan perros verdes en este país de perros amarillos.

Cuando mis papás juntaron todo el valor que pudieron y me metieron en un cole chino, sin hablar chino, no se podían imaginar que con el pack del cole venía una familia tan fantástica como la nuestra. Aquí les  presento a nuestra 中国家 [Zhōngguó jiā] (familia china):

La familia Ao está compuesta por "Mamemi", mi profe del cole, que en realidad se llama 雪 [Xuě] (nieve en chino) pero que yo la llamo mamemi, y que decidió adoptarme el primer día que me vio.


Un 叔叔 [Shūshu] (tío), el marido de mi profe, que es un amor de persona y es capaz de darle dos besos a mi mamá y abrazos a mi papá para que vean lo importante que somos en sus vidas.


Una 阿姨 [Āyí] (tía). la hermana de mi profe, que es mi fan Number 1, que tiene fotos mías que ni mis padres han visto.


Y una 奶奶 [Nǎinai] (abuela) que se ha ganado el amor de todos nosotros sin hablar ni una sola palabra de inglés ni de español.

También hay un 爷爷 [Yéyé] (abuelo) pero nunca le hemos visto porque trabaja hasta muy tarde (empezamos a pensar que no existe, la verdad....)

Y todo ellos entraron en nuestra vida al "estilo chino".... insistiendo mucho, mucho para que fuéramos a comer, a pasear, a charlar, a cualquier cosa con ellos.... Y al final mis papás aceptaron una invitación y desde entonces ha sido un no parar.

De vez en cuando vamos a su casa a comer, la 奶奶 le da clases de cocina china a mi mamá (en un idioma medio chino, medio mímica que parece funcionarles muy bien), la 阿姨 me hace doscientas fotos, Mamemi se ocupa de mí como si fuera su propia hija y el 叔叔 practica conmigo para cuando sea papá e insiste que mi papá beba hasta casi el coma etílico con él (cosa que mi padre se niega....)

Y así es como cuando nos vemos nos ceban hasta que nos sale la comida china por las orejas...



Y nos tratan como parte de su familia invitándonos a su casa con cualquier excusa


Así que que nadie diga que el idioma es una barrera porque mi familia sin hablar casi nada de chino ha sido capaz de encontrar una familia china que los quiere, los ayuda y los acompaña en esta aventura chinesca!!!

¡Si es que tenemos una suerteeee!

MI EXPERIENCIA CICLISTA EN CHINA


Cuando mi mamá vivía aquí sola, Tianjin siempre estaba poblada de bicis y bicis.... A ella le encantaba subirse a su bici e ir con toda la marabunta china de un lado para otro. Es curioso pero se sentía muy libre apretada entre toda esa gente...


Cuando volvió a China esperaba encontrarse con lo mismo, pero para su gran pena se encontró que la mayor parte de esos ciclistas ahora son conductores de coches.... y cuanto más grandes mejor!! Así que aunque se volvió a comprar una bici no la usa porque le da mucho miedo ir casi sola en las calles pobladas de coches... La sensación de libertad ha dado paso a la sensación de sentirse prisionera entre tanto coches con conductores cada vez más locos (conducir no es su fuerte aquí.... Mi papá dice que esta gente conduce sus coches como conducían sus bicis y claro, así mal vamos)

Pero mi papá no vivió aquella época ciclista dorada, así que no le da tanto miedo ir en bici ahora. Así que cuando fuimos en febrero a España mis papás compraron una sillita de niño delantera.... ¿Que si no hay sillas aquí? Bueno....Sí, sí que hay, pero ni yo con dos años de edad tengo claro que pasasen alguna prueba de seguridad. Van desde sillas de playa atadas de cualquier manera a la bici hasta una maraña de hierros que ni arnés tienen para coger a los niños. Aquí tenemos algunos ejemplos:


 Y esto visto en vivo y en directo da miedito, miedito... Ahí tienen una foto que sacó mi papá preguntándose ¿Qué es eso que sobresale en la parte de delante de la moto? Señora al menos cómprese una de las sillitas de arriba por diosssss


Así que mi mamá se negó rotundamente a que yo fuera en plan playa o muriera cortada por algún fierro que saliese disparado de mi propia silla y se puso a investigar cuál era la mejor silla para mí. Todo ello teniendo en cuenta los siguientes factores:

1.- Tengo una hija que no para quieta
2.- Vivimos en un país en el que ser ciclista es ser suicida
3.- Irá al cole por las mañanas en la silla y querrá dormir

Y así fue como se decidieron por una silla delantera, con un buen arnés de seguridad y con una almohada para poder echar una cabezadita si me entraba el sueño. La silla Wee Ride:



Que si en España es una silla curiosa, por ir delante, durmiendo a pata suelta, ni les cuento en un país como China donde los niños van o sueltos o atados con un pañuelo (como va un compañierito mío de clase desde que casi ni se tenía sentado con su papá canadiense....)

Así que cuando llegó el buen tiempo mis papás decidieron empezar el proceso de adaptación a la bici y probamos un par de días.... yo desde el principio entendí lo de que la almohada era para dormir e iba absolutamente encantada con mi "gorro" rosa.


Y después salimos a la zona de la uni donde vivimos que no hay coches ni motos suicidas y fue todo un éxito. Yo me porté bien, no me quise bajar ni nada.


Así que desde entonces cada día que hace bueno pues mi papá y yo vamos en bici al cole. Somos la atracción del camino.... Nos hacen fotos desde los autobuses pero bueno, eso no es ninguna novedad!!!

Y en el cole todavía no se creen que mis papás se cargaran semejante silla de niños desde Europa pudiendo comprar una sin arnés ni nada en taobao por 4 euros de nada!!! Pero eso sí, bien que les gusta hacerme fotos en la bici eh....





Y en mi cumple, mi profe Ao Xue y su familia me regalaron mi propia bici para que vaya acostumbrándome a viajar yo solita en este país-jauría lleno de coches y motos suicidas.




Y ahí ando ahora, practicando, practicando.... algún día iremos papá delante y yo detrás en mi bici al cole!!! (de eso se hará otra entrada fijo!!)